Guillermo Barros Schelotto y Carlos Tévez
Luego técnico y pupilo en Boca, en su día compartieron la delantera del 'Xeneize' e incluso, en la foto que ilustra la lista, se alzaron con la Copa Intercontinental juntos tras derrotar al Milan. Ese día, Tévez sustituyó a Barros Schelotto. Nunca hubiera imaginado que años después sería su técnico en Boca.
Zinedine Zidane y Sergio Ramos
El mago francés apuraba sus últimos días en el Real Madrid cuando un jovencísimo Sergio Ramos comenzaba a ganarse el cariño de la grada con sus actuaciones. Algo más de una década después, Zidane imparte lecciones desde la banca y Sergio Ramos las interpreta a la perfección desde el terreno de juego.
Cholo Simeone y Fernando Torres
En pleno apogeo del 'Niño', Simeone pegaba sus últimos coletazos en el fútbol profesional con un casi recién ascendido Atlético de Madrid. Ambos hicieron buenas migas y el técnico argentino fue el primero en decir 'sí' al regreso del delantero español al Manzanares.
Roberto Mancini y Cholo Simeone
Pero al Cholo no sólo le pasó esta curiosa anécdota con Torres. Él también fue dirigido por un jugador que previamente había sido compañero suyo en la Lazio. No fue otro que Roberto Mancini, que formó junto al Cholo una de las mejores plantillas del equipo romano antes de comenzar a entrenar de manera prematura.
Luis Enrique y Andrés Iniesta
Caso parecido al de Zidane y Ramos. El joven albaceteño debutaba y comenzaba a dejar detalles de su inmensa clase en un Barcelona de poco éxito en el que Luis Enrique daba sus últimas lecciones como profesional. Ya mucho más sosegado y como capitán del vestuario, seguro que Luis Enrique dejó ver a Iniesta que tenía maneras de gran técnico, aunque estamos casi seguros de que Andrés nunca pensó que le fuera a dirigir y a hacer ganar tantos títulos.
Filippo Inzaghi y Christian Abbiati
Guardameta y delantero compartieron bastantes temporadas en el banquillo del Milan con el arquero casi siempre siendo una opción de banquillo de los 'rossoneri'. Tras apurar su carrera bastante, el portero acabó encontrándose con que alguien que le marcaba goles en los entrenamientos iba a pasar a ser su nuevo técnico. ¿Qué tal se lo tomaría?
Cosmin Contra y Alexis Ruano
La temporada 2006-07, un recién llegado Alexis deslumbraba en el Getafe y se ganaba el traspaso al Valencia con un Cosmin Contra ya veterano que seguía a su mejor nivel tras su frustrado paso por Atlético y Milan. Siete años después, el rumano llegaba para salvar al equipo azulón del descenso, esta vez como entrenador, y Alexis fue siempre una de sus primeras opciones para la defensa. Se ve que la química entre ambos, tanto siendo jugadores como actuando como futbolista y entrenador, era buena.
Frank Rijkaard y Demetrio Albertini
El italiano fue una solución de emergencia de Rijkaard para el Barcelona en la segunda parte de la temporada 2004-05. Antes, durante un buen puñado de años, compartieron equipo en el Milan triunfador de Arrigo Sacchi. Definitivamente, una buena amistad dentro del terreno de juego que permitió que Albertini conociera el Camp Nou desde dentro, aunque, desgraciadamente para él, apenas pudo jugar cinco partidos.
Quique Sánchez Flores y Fernando Morientes
Cuando el bueno de Quique firmó por el Zaragoza, probablemente únicamente estuviera pensando en alargar un poco más su ya de por sí extensa carrera. Sin embargo, allí conoció a un jovencísimo Fernando Morientes, que le deslumbró por su olfato goleador. Compañeros en el terreno de juego en aquella temporada 1996-97, Quique dirigiría al 'Moro' en el Valencia solo diez años después, en la 2006-07.
Vincenzo Montella y Francesco Totti
Era complicado que llevando más de 20 temporadas con la Roma no hubiera coincidido en el banquillo con algún ex compañero. Pues sí, Vincenzo Montella, uno de sus acompañantes habituales en el ataque del equipo romano, dirigió a Francesco Totti durante la temporada 2010-11. Después de muchos años acatando órdenes de 'Il Capitano' dentro del terreno de juego, se le tuvo que hacer raro mandar a todo un crack como Totti desde el banquillo.