El Nápoles no estuvo cómodo en ningún momento, y desde muy temprano se notó que el Besiktas iba a dar guerra. Concretamente, a los trece minutos de juego.
Adriano, hoy extremo zurdo, empujó a las redes un balón de Quaresma. San Paolo se quedó helado, y sólo reaccionó cuando Mertens puso el empate en el luminoso quince minutos después.
La alegría duró poco. Aboubakar, la némesis del Nápoles hoy, anotó su primer gol de la noche a los 38 minutos. Se mascaba la tragedia.
Con ese sorprendente resulado nos fuimos al descanso. A los cinco minutos de la reanudación, penalti para el Nápoles. Lo lanzó Insigne, pero se lo detuvo de manera magistral Fabricio Agosto, el ex guardameta del Depor.
Veinte minutos después el Nápoles dispuso de su segunda oportunidad. Esta vez lo lanzó Gabbiadini, quien no falló. Él también dispuso de una de las mejores oportunidades del partido, un golazo de chilena casi sobre la línea de gol que fue anulado por fuera de juego.
Sin embargo, este obra guardaba una sorpresa para el acto final. Cuando parecía que el resultado final sería un empate, apareció de nuevo Aboubakar y, otra vez a pase de Quaresma, como en el primer gol, sentenció al Nápoles.
Jarro de agua fría para los de Sarri, que pretendían quedarse como líderes en solitario y han logrado todo lo contrario, que la cabeza del grupo se apriete.
El Nápoles es líder con seis puntos, seguido del Besiktas, con cinco, y el Benfica, con cuatro.
- Ficha del partido:
2 - Nápoles: Reina; Maggio, Chiriches, Koulibaly, Ghoulam; Jorginho (Diawara, m. 70), Hamsik, Zielinski (Allan, m. 83); Mertens, Insigne (Gabbiadini, m. 65), Callejón.
3 - Besiktas: Fabricio; Beck, Marcelo, Tosic, Erkin; Uysal (Talisca, m. 90), Hutchinson, Adriano (Inler, m. 70), Arslan (Tosun, m. 75), Quaresma; Aboubakar.
Goles: 0-1, m.13: Adriano. 1-1, m.30: Mertens. 1-2,. m.38: Aboubakar. 2-2, m.65: Gabbiadini. 2-3, m.86: Aboubakar.
Árbitro: Sergej Karasev (RUS). Mostró cartulina amarilla a Adriano (m. 53), Maggio (m. 54), Erkin (m. 68) y Aboubakar (m. 88).
Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del grupo B de la Liga de Campeones disputado en el estadio San Paolo ante cerca de 45.000 espectadores.