Nadie duda de que el Bayern de Múnich se llevará su octava Bundesliga consecutiva. Antes de la exhibición en Leverkusen, todo quedó claro tras el triunfo en el Signal Iduna Park (0-1), que dio el mazazo definitivo al Borussia. Los demás no son consistentes como para optar al título. En estas, el fin de semana que viene se produce el primer 'match-ball' para que los de Flick confirmen el título.
La carambola no es fácil, pero sí posible: los bávaros deben ganar al Borussia Monchengladbach en la visita al Allianz y esperar a que los de Favre caigan en el campo del Fortuna Düsseldorf.
Además, el Borussia jugará tres horas antes (del sábado 13 de junio), por lo que el Bayern saltará al césped sabiendo si la posibilidad sigue estando en pie o no. También le permitiría festejarlo en casa, aunque ello pasa a un plano menor habida cuenta de que no habrá público en las gradas.
Si los aurinegros empatan y el Bayern gana, serían virtualmente campeones, puesto que la ventaja quedaría en nueve puntos a falta de los mismos por jugarse, y los de Flick les aventajan en 14 tantos en el averaje general.
En cualquier caso, el cuadro muniqués depende de sí mismo en las cuatro jornadas que quedan. Con su ventaja de siete puntos sobre el segundo y once sobre el tercero, le basta con ganar dos de los cuatro partidos en juego para llevarse matemáticamente la Bundesliga sin carambolas.