El Fuenlabrada parece estar abonado a los empates. El cuadro que dirige Sandoval, que venía de dos igualadas consecutivas, volvió a sumar un punto en casa ante el recién ascendido UD Logroñés.
El cuadro riojano, al borde del descenso, no tuvo ningún miedo en apretar a los madrileños, que se vieron sorprendidos en la primera parte por un equipo que no parecía estar en la parte baja de la tabla.
De hecho, las primeras ocasiones llegaron en el bando visitante. Iribas tuvo que tapar el disparo de Rubén en el área chica y más tarde Paulino falló ante Rosic una opción clara, aunque al final fue fuera de juego.
Sandoval sabía que tenía que darle un cambio al equipo porque no estaban muy cómodos, algo que sí notaba el Logroñés. Tras el descanso, el ex técnico el Córdoba, entre otros equipos, movió el banquillo y las cosas cambiaron.
Los madrileños dieron un paso adelante y obligaron a su oponente a tener que dar varias zancadas hacia atrás. A pesar de tener el dominio del juego, las ocasiones no eran demasiado peligrosas.
Nteka se mostró bastante activo, pero no fue capaz de tumbar a la defensa visitante. Ya sobre el final, Glauder remató de cabeza prácticamente solo y se marchó de forma inexplicable fuera.
0-0 y justo reparto de puntos. El Fuenla sube hasta la segunda posición con 13 puntos mientras que el Logroñés se mantiene en el límite que marca el descenso con cinco puntos.