Un gol de penalti del centrocampista Leonardo Bittencourt a falta de ocho minutos para la conclusión permitió al Werder Bremen rescatar un empate (1-1) en casa ante el Kölna, en un gris encuentro en el que ni locales, ni visitantes lograron generar claras ocasiones de gol.
De hecho, lo más destacado de la primera mitad fue la sustitución del portero visitante Timo Horn, que tuvo que abandonar el terreno de juego a los 40 minutos por lesión.
Una dinámica que parecía abocar a ambos conjuntos a un empate sin goles, que no servía ni al Werder Bremen para alcanzar los puestos europeos, ni al Kölnia para escapar de la parte baja de la clasificación.
De hecho, los goles llegaron más por desaciertos que por el buen hacer de ninguno de los dos contendientes, ya que si el finés Niklas Moisander anotó a los 67 minutos en propia meta el 0-1, el gol del Werder Bremen llegó en un evitable penalti de Sebastiaan Bornauw.
El defensa belga tocó el balón con el brazo en un centro en apariencia inofensivo, condenando al cuadro visitante a una pena máxima que Bittencourt no desaprovechó para poner a los 82 minutos el definitivo 1-1.