Alderweireld se transformó en el héroe y el enemigo del Aston Villa en la primera mitad de su duelo ante el Tottenham. Se marcó en propia puerta en los primeros compases por un mal despeje, pero, un rato después, firmó un golazo para arreglarlo y devolver el empate al luminoso.
La primera jugada fue un centro que trataba de alcanzar Al Ghazil y ante el que el zaguero metió la punta de la bota para evitar que le llegara a su contrincante. Desafortundamente, el esférico rebotó en su pie y se fue directo al fondo de las mallas de su propia portería.
Hubo que esperar hasta el 27' para que enmendara su error. En un saque de esquina, Lucas Moura no llegó a rematar y fue el mismo Toby el que controló la bola, se dio la vuelta y puso el 1-1 con una volea de bella factura que clavó en la meta de Reina.
Los 'spurs' celebraron con intensidad la diana, pues estaban pasando apuros: Lloris tuvo que intervenir en varias ocasiones en ese tramo del encuentro para evitar que los suyos volvieran a estar por debajo. En todo caso, Alderweireld pudo respirar tranquilo de no ser el culpable de una derrota provisional.
February 16, 2020