Se trataba de un partido dentro de la Copa Amistad, pero Aldosivi demostró que no pretendía hacer amigos, a pesar de que el primer tiempo fue discreto para los dos.
Penco abrió la lata y, dos minutos después, Rosales, que había sido antes asistente, ponía el 2-0. De repente, vuelco al partido ante un equipo de Gimnasia que no supo reaccionar ni al primero ni al segundo.
Al final, Lugüercio anotó un gol más para Aldosivi, que coronó una victoria importante en lo que podía ser un duro partido cara al inicio en el torneo oficial.