Alemania logró la victoria ante Hungría en un trabajado partido ante la selección 'magyar'. Los húngaros estuvieron bien plantados en el terreno de juego y lograron las pocas ocasiones que tuvieron, por no decir casi ninguna, a la contra.
A Draxler le anularon un gol en el primer minuto por un fuera de juego que sólo vio el colegiado. A partir de ahí, hubo un goteo de ocasiones cada cinco o diez minutos por parte de Alemania que anunciaban que tarde o temprano llegaría el gol.
Así fue, una buena jugada de la 'Mannschaft' por banda izquierda terminó en Hector, que centró al área y Lang, al intentar que Götze rematase en área pequeña, se introdujo el balón en su propia portería,
En la segunda parte llegó el habitual carrusel de cambios de los amistosos. Uno de esos cambios, Mario Gómez, fue uno de los protagonistas del segundo gol. Un remate suyo, en una jugada en la que partía en fuera de juego, fue rechazado por el portero, pero el balón lo envió Müller al fondo de las mallas.
Partid correcto de los de Löw, que han demostrado que no llegan todo lo engrasados que quisiesen a la Eurocopa. Hungría ha dejado claro que no va a ser un rival fácil de batir, ya que han demostrado que son un equipo que, al menos, defiende bien y con criterio.