Tanto el director general (Alemany) como el director deportivo (Longoria) parecen llamados a dejar el Valencia en las próximas horas, días a lo sumo. La destitución de Marcelino fue el preludio de lo que está por suceder.
Según 'Superdeporte', el Valencia estaría negociando con ellos la rescisión de sus contratos. Por su parte, 'El Desmarque' afirma que si su cese no se ha producido ya es, entre otras cosas, por la indemnización que recibirían por ello.
Sería el paso previo a la renovación total de la dirección deportiva del Valencia, tras la pérdida de confianza del mandamás del club.