"Tenemos que hacernos fuertes en nuestro campo para que vengan aquí los equipos y nos respeten. En los cinco o seis primeros partidos la posesión era nuestra y éramos dominantes porque tenemos jugadores para eso", argumentó el sevillano.
El jugador cedido por el Real Betis pronosticó un partido "complicado" ante el Tenerife, un rival del que destacó que "le gusta jugar, salir desde atrás y cuenta con laterales y extremos rápidos".
Álex Martínez admitió que la plantilla ilicitana está "deseando" que llegue el partido para quitarse el mal sabor que le dejó la derrota en Albacete, donde su equipo, pese a jugar con superioridad numérica media hora más, no pudo puntuar.
"Esto es fútbol y hay que aprender de los errores. El que perdona pierde", dijo en relación al encuentro de la pasada jornada. "Perdemos los partidos, pero hemos mejorado defensivamente. Solo nos hacen una o dos ocasiones, pero nos meten gol. Así no puede ser todo el año. Creamos más que el rival y al final los resultados llegarán", explicó el defensa andaluz.
El lateral restó importancia a las bajas que acumula el Elche en defensa y aseguró que cualquier futbolista de la plantilla puede jugar "igual o mejor" que los que venían actuando.
Álex Martínez admitió estar mostrando una pose menos ofensiva en los últimos partidos, algo que justificó al recordar que como defensa que es "lo primero es defender". "No subimos tanto como antes porque los equipos ya nos conocen mejor", agregó.
El sevillano defendió el trabajo de su entrenador, Rubén Baraja, ya que comentó que la plantilla está "encantadísima" con el trabajo del técnico, con el que confía en seguir trabajando "todo el año".
"Está haciendo, junto a su cuerpo técnico, un trabajo grandísimo. Nos lo dan todo hecho para que hagamos el trabajo. Esto es muy largo y tampoco vamos los últimos, no hay que alarmarse. Tanto yo como mis compañeros estamos con el míster al máximo", dijo.
El jugador del Elche reconoció que el equipo no tiene la misma confianza con el balón que tuvo en anteriores jornadas y que es algo que el entrenador está intentando devolver al grupo. "El míster nos dice que tenemos que ser descarados dentro del campo y no tener miedo a nada", asegura.
Álex Martínez comentó que para él cualquier partido en la categoría "es una final" ante la enorme igualdad existente y admitió tener "una espinita clavada" por no haber podido marcar aún a pesar de ser el encargado de lanzar las faltas.
"Tampoco he tenido tantas oportunidades, pero espero meter algún gol durante la temporada", concluyó.