Poco le faltó al Chelsea para jugárselo todo a cara o cruz en Stamford Bridge. No fue hasta los últimos minutos cuando los 'blues' pudieron perforar la portería rival.
El Slavia de Praga, al contrario que hiciese contra el Sevilla en octavos, se mostró mucho más sólido. La defensa le dio mucho aguante ante las balas en ataque de los 'blues'.
La pistola del Chelsea parecía encasquillada, entre otros motivos, por la gran cantidad de rotaciones en el once de Sarri. Sin Hazard o Kanté, a los ingleses les faltaba profundidad.
Lo que mejor funcionó en el Chelsea fueron sus laterales, sobre todo Marcos Alonso. El español estuvo muy correcto tanto en defensa como en ataque y fue el autor del tanto de la victoria.
Willian también tuvo una actuación destacada. El brasileño estuvo a punto de adelantar al Chelsea con un disparo que se acabó estrellando en el larguero a los 25 minutos de encuentro.
Por parte del Slavia, su mejor hombre fue el delantero Olayinka, que volvió loco a los centrales visitantes hasta que fue sustituido cuando restaba menos de diez minutos para el final.
En la segunda mitad cambió el panorama. La entrada de Kanté, Hazard y Loftus-Cheek dio mayor presencia en ataque del Chelsea. Los cambios de Sarri surtieron efecto y el Slavia se encerró.
Rüdiger tuvo una clara a la salida de un córner, pero la buena respuesta de Kolar evitó el gol. Willian también lo intentó con un chut cruzado que se perdió por la parte izquierda de la portería.
De las botas del brasileño llegaría el tanto en el minuto 86. Un centro desde la derecha lo remató Marcos Alonso, que pareció desde atrás en el segundo palo para marcar a placer.
Sin tiempo para la reacción, el Slavia acabó cayendo. Los checos deberán viajar a Londres con la necesidad de hacer saltar la banca, al igual que hico ante el Sevilla. El Chelsea deberá mostrarse más contundente si quiere evitar un susto.