Volvió a la titularidad Ángel. Cuesta creer que el dueño del gol en el Getafe aún no sea un fijo indiscutible en el once de Bordalás. Pero así son las cosas. Este domingo rascó un punto de donde no había nada, porque el Getafe atraviesa una pequeña crisis identitaria. Una pena para el Athletic que los 'leones' no fueron a hacer daño. El empate, finalmente, fue justo.
Tras muchas semanas sin ganar llegaba el Getafe, que salió con una formación ofensiva, ya con Cabaco perdonado y convocado (de hecho, jugó en el segundo tiempo) y con Cucho Hernández y Cucurella, de escuderos a los referentes en el ataque, Jaime Mata y Ángel. Sin embargo, al margen de los interiores, faltó chispa, creación, capacidad de sorprender a un gran Athletic.
Garitano salvó el puesto ante el Betis. En el Coliseum debía confirmarse y, por ello, apostó por el mismo once que tan bien le fue en San Mamés. La versión de la primera parte fue impoluta, con un Villalibre excelso, y no solo por su gol, además del cerebro Muniain, el puñal de Iñaki Williams, la calidad de Vesga y la escoba de Vencedor. Pero hay que hacer más para ganar al Getafe.
Le faltó mordiente al Athletic. Mala leche, en definitiva, para ir a por el segundo gol y finiquitar a un Getafe que fue dando tumbos. Solo el Cucho Hernández y Cucurella aportaron algo distinto a los de Bordalás. Y el gol tan tempranero del 'búfalo' Villalibre le vino de espanto: testarazo picado en el saque de esquina colgado por Berenguer. Primer gol de la temporada para el '20'.
Vesga e Íñigo Martínez tuvieron el 0-2 en sendas ocasiones antes del descanso. El Getafe, absolutamente noqueado. El descanso le sirvió para aclarar un poco las ideas, y enfrió al Athletic, que se fue a los vestuarios con la sensación de que debía mandar con un resultado mayor en el Coliseum. Error de Garitano también, pues no apretó a los suyos para imprimirles ambición.
Nada más comenzar, un palo para Arambarri. El paso de los minutos asentó el planteamiento defensivo de los 'leones'. No parecía dar la sensación el Getafe de poder dar la campanada y empatar el encuentro, pero se asomó poco a poco hasta que le llegó la opción a su ángel de la guarda. Ángel cazó un balón en la frontal en el 75' y no perdonó. No se movió el marcador y empate justo entre dos equipos con obligación de mejorar.