Después de la primera derrota ante la Selección Colombiana, el conjunto de Lionel Scaloni necesitaba una victoria frente a Paraguay, que comenzó adelantándose en el marcador con el gol de Sánchez.
Leo Messi logró devolver la igualada al marcador con un penalti pitado a instancias del VAR, pero una acción inocente de Otamendi, solo unos minutos después, dejaba otra vez el electrónico a merced de el lanzamiento desde los once metros.
Derlis González fue el encargado de golpearlo, pero Armani adivinó sus intenciones y logró detener el penalti. El portero de River Plate lo celebró con rabia e hizo un gesto a la grada.
Parece que el portero de la 'Albiceleste' mandó callar a parte de la afición por las críticas recibidas durante los últimos meses...
20 de junio de 2019