La noticia saltaba durante la tarde del sábado, cuando los medios brasileños se hacían eco de la exclusiva contada por 'FOX Sports Brasil'. Los hechos se habrían dado el pasado 13 de noviembre.
Tras el encuentro ante Vasco da Gama en el Brasileirao, Bruno Henrique, supuestamente, dio positivo en el control antidoping que le hicieron después del pitido final, diez días antes de la final de la Copa Libertadores ante River.
Como cuenta la fuente citada, el atacante consumió brinzolamida. Aunque no hubo comunicado oficial, desde Flamengo le comunicaron a la prensa que el jugador tiene autorización para su uso.
Todo esto se debe a un problema ocular llamado glaucoma. Fernando Solera, director de dopaje de la Confederación Brasileña de Fútbol, lo corroboró.