"Las personas que se salvaron viajaban en la parte trasera de la aeronave, que ha sido la menos dañada. Los trabajos son complicados por la dinámica del accidente y sobre todo por el lugar, pero confiamos en que aún pueda haber supervivientes", ha declarado Juan Carlos Arango, uno de los miembros de los servicios de asistencia, en varios medios colombianos.
No sólo no ayuda el lugar en el que ha terminado el avión, sino que, además, se esperan intensas lluvias en las próximas horas, lo que dificultará, aun más, las labores de rescate de los cuerpos de los fallecidos.
"Para transportar los cuerpos hasta los vehículos, como sucedió con los supervivientes, debemos caminar más de 20 minutos, no hay otro acceso. Y esperamos que llueva intensamente en las próximas horas", aseguró Juan Carlos Arango.
Las muestras de apoyo hacia Chapecoense no se han hecho esperar por parte del mundo del fútbol. Los clubes brasileños cederán jugadores gratis durante los tres próximos años al equipo con el objetivo de que descienda. Su rival en la Copa Sudamericana, el Atlético Nacional, ha pedido a la CONMEBOL que Chapecoense sea proclamado campeón del torneo.