El Deportivo de la Coruña, ubicado en la sexta posición de la tabla, tiene muy complicado alcanzar el 'play off' de ascenso a Segunda División.
Muchos en Riazor comienzan a conformarse con terminar en la zona media de la tabla y escapar del descenso. Uno de sus motivos, la tardía asimilación del equipo de la categoría que estaban disputando.
Héctor Hernández lo reconoció públicamente: "Desde el principio no fuimos conscientes de que estábamos jugando en Segunda B, quizás, nos hemos dado cuenta tarde".
"El Deportivo vive en una dinámica que viene de años atrás. Desde el principio no fuimos conscientes de que estábamos jugando en Segunda B. Eso condiciona mucho la cabeza, que es lo principal en este juego", agregó.
El lateral, además, confesó que la presión que soportan es muy grande: "Te llama el Dépor y todos pensábamos que era estar un año en Segunda B y subir al lugar que se merece, el fútbol profesional. Y lo pensábamos todos. Los medios, los jugadores, la afición...".
"Creíamos que se trataba de llegar frescos al 'play off', que la primera fase la pasaríamos con la gorra... pero nos dimos cuenta de que hay un rival cada domingo, campos a los que no estás habituado, superficies que no son las más cómodas... igual nos dimos cuenta tarde. No hay excusas, no queda otra que ganar al Pontevedra", agregó.
Mientras tanto, el Dépor prepara la próxima cita liguera. Un encuentro para el que son dudas Miku y Derik, que no se ejercitaron este martes a las órdenes de Rubén de la Barrera en la vuelta al trabajo.