Parece imposible ver a Balotelli calmado en un partido de fútbol y más si cabe cuando lo quitan del campo antes de tiempo. En el Adana Demirspor-Konyaspor, el italiano se pilló un rebote importante.
Y no era para menos. En el 47', el delantero fue sustituido y se lo tomó a malas. Nada más llegar al banquillo, el futbolista compartió su malestar con un compañero y se le veía muy alterado.
Llegó incluso a pegar varios gritos y a tirar algo al suelo como señal de protesta. Pero eso es todo. La secuencia terminó con un golpe a la cristalera.