"Me senté en la ultima fila de atrás junto a Marc Bartra, que fue herido con pedazos de vidrio en el momento del impacto", explico el suizo en Twitter.
"Después de la explosión todos nos tiramos al suelo en el bus, no sabíamos que hacer", añadió el portero del conjunto alemán, que destacó que la policía "actuó muy rápido".
"Estamos todos muy conmovidos, nadie pensó que había un partido de fútbol minutos después", concluyó Bürki.