Rafa Benítez siente que la directiva del Newcastle no le respalda. Que no hace lo suficiente para satisfacer sus demandas. Que, directamente, ignora sus exigencias.
La gota que colmó el vaso fue la cesión de Tammy Abraham, canterano del Chelsea que jugará en el Swansea esta temporada. Benítez pidió un esfuerzo por hacerse con esta cesión, y al Newcastle se le volvió a escapar.
El técnico español ya estuvo a punto de abandonar el barco tras lorgar el ascenso, pero se comprometió a asentar a los 'magpies' en la Premier.
Esperaba un respaldo en forma de fichajes para hacer una plantilla competitiva, y no han llegado. Eso ha colmado la paciencia de Rafa Benítez.