Como si se tratara de un auténtico infierno. La afición del Zenit calentó el ambiente y lo hizo con un recibimiento espectacular.
Los hinchas se pusieron en dos filas. Unos en un lado de la carretera, otros justo enfrente. Y, a medida que iba pasando el autobús del Zenit, los aficionados iban prendiendo sus bengalas.
La visión desde lejos es absolutamente espectacular. Como si del mismo infierno se tratara, el autobús del Zenit parecía danzar entre las llamas.
El Zenit se medía al Fenerbahçe en la Europa League y la hinchada quiso ser el jugador número 12 antes siquiera de que el árbitro pitara el inicio del encuentro.
Sin duda, este recibimiento del Zenit se quedará grabado en las retinas de los amantes del fútbol.
21 de febrero de 2019