Si bien a los puntos el Nápoles pudo merecer algo más el triunfo, hubo combate nulo y reparto de puntos entre los dos equipos punteros del campeonato italiano.
La sapiencia del Inter y el buen papel de Handanovic frenaron un Nápoles que hasta la visita de los 'neroazzuri' lo había ganado todo. Fin a una racha estelar.
Con un Insigne muy activo, el Nápoles merodeó la meta del Inter, pero no mordió. Handanovic abortó en una doble parada una gran ocasión al alimón de Callejón y Mertens.
Con el paso de los minutos el conjunto de Milán se encontró más cómodo. Candreva hacía daño por las bandas y cerca estuvo Valero de inaugurar el marcador.
Tras el descanso, pese a las intentonas de Insigne, el Inter se hizo con el control del juego y Albiol sacó bajo palos una clarísima jugada de gol que hilvanaron Vecino e Icardi.
Pero nadie se puede fiar de este Nápoles y en el minuto 90 Mertens disfrutó de una ocasión clarísima... que frustró un imponente Handanovic.
El Nápoles se queda en cabeza con 25 puntos y el Inter sigue a la misma distancia tras un empate con el que acumula 23.