Real Santander comenzó controlando el partido, sabiendo que llevando a cabo un juego de pases anulaba el ímpetu de los locales. Por ello, lograron el premio de ponerse por delante.
Sin embargo, esto reactivó a Chicó, que tras intentarlo una y otra vez consiguieron empatar mediante un penalti. A la vuelta de los vestuarios, de nuevo se pusieron los visitantes por delante en el marcador.
Boyacá Chicó se dispuso a darlo todo. No solo empató, sino que no se conformo y logró el 3-2 final, totalmente merecido, puesto que apostó y confió más en la victoria. Todo queda visto para sentencia en Floridablanca.