"El presidente me ha transmitido confianza", aseguró Calleja. "El fútbol son resultados y no dejaré de trabajar nunca. Si la entidad cree que debe haber un cambio lo aceptaré, ya veremos las decisiones que toman. Creo en el equipo, pero soy el primer responsable", añadió.
El preparador del Villarreal confesó que, ante el Espanyol, su equipo hizo el "peor partido" de la temporada: "Ha sido la única vez que veo al rival mejor que nosotros. Han sido superiores en todas las facetas. En la segunda parte el equipo se ha sentido más cómodo, pero la balanza se ha decantado hacia el equipo que ha hecho más méritos".
Calleja apostó por la autocrítica. "Es una situación negativa. Veníamos con la idea de ganar y ponernos cerca de puestos europeos. Debemos buscar durante estas semanas de parón soluciones para levantarnos. Ha sido un golpe duro", concluyó.