Caracas desperdició una buena oportunidad para cerrar su billete para octavos de final de la Copa Libertadores al caer 2-0 en casa ante Independiente Medellín.
Buena parte de culpa la tuvieron los tres jugadores que fueron expulsados antes de tiempo. Todo comenzó en el 19', con la doble amarilla de Notaroberto, que arrolló un rival para tomar el camino de las duchas.
Ya hubo que esperar a la segunda mitad para ver las dos últimas rojas. En el minuto 70, Celis pisó muy fuerte a un rival y el árbitro no dudó en sancionarle.
Poco después, en el 79', Fereira le soltó el codo a un contrario dentro del área y vio la roja. El colegiado indicó la pena máxima y el DIM la falló.