El técnico del conjunto ruso, en su comparecencia en la sala de prensa del estadio Ramón Sánchez Pizjuán, afirmó que el Sevilla, que había encajado un 5-1 en el partido jugado en Moscú en la tercera jornada, "era capaz de poner en dificultades a cualquiera".
Carrera destacó que fue "una pena entregar el primer tiempo", base para la derrota de su equipo, aunque puntualizó que "quedan dos partidos importantes" y que ya están "pensando en el siguiente" ante el Maribor esloveno en la capital rusa y después en Inglaterra ante el Liverpool.
También se refirió a la prohibición de la UEFA de venderle entradas a los seguidores del Spartak para este partido por incidentes en anteriores desplazamientos, y dijo que "ha sido una decisión" de este organismo y que su "opinión es complicada", aunque reconoció que el equipo "lo ha pasado mal sin el apoyo de sus aficionados y eso se ha sentido, por supuesto".