El defensa Carriço se fue del Sevilla para firmar con el Wuhan Zall en un movimiento que él mismo vio con muy buenos ojos. Un protecto que le satisfizo al no poder seguir en el Sevilla.
"Estaba a punto de renovar y no llegamos a un acuerdo. Lopetegui transmitió al club que quería que me quedara, que era importante para él y para el equipo", dijo en una entrevista para 'Tribuna Express'.
Por otro lado, el jugador del club asiático se acordó de aquella imagen que dio la vuelta al mundo y en la que se besó en la boca con Rakitic en la final de 2014 de la Europa League.
"Tengo mi sexualidad muy bien resuelta y no le di importancia. Creo que la gente o tomó más porque también fue contra el Benfica. Estaban un poco amargados y tuvieron que descargarse con alguien. Esto sucedió con varios jugadores como Maradona en las celebraciones", sentenció.