Carrión colgó la botas en 2011 con 32 años jugando con el Peñarroya en Tercera División y ese mismo verano consiguió el carné de entrenador para enrolarse en el club barcelonés, en cuyo equipo femenino consiguió el título de la Copa de la Reina, logrando que las chicas del Espanyol alcanzaran la tercera posición en la liga, mientras que la temporada siguiente concluyó el campeonato en quinto lugar.
Tras aquellos dos años de experiencia en la elite de fútbol femenino español regresó al Córdoba, ya que el que fuera su compañero en el vestuario blanquiverde Pablo Villanueva 'Villa' le ofreció ser su segundo en la temporada 2013-14 al frente del primer equipo.
Villa fue destituido en febrero y aquello le dio la primera oportunidad a Carrión en un banquillo profesional, al debutar de manera interina ante el Numancia en Los Pajaritos, pero la rotunda derrota por 3-0 le llevó a un segundo plano y el Córdoba fichó a Albert Ferrer y Carrión se convirtió en su tercer entrenador.
El Córdoba ascendió a Primera meses después y Carrión siguió en el cuadro técnico de Ferrer hasta que este fue destituido, lo que acabó por llevarlo al banquillo del filial en aquella temporada con hasta tres relevos al mando del primer equipo.
Luis Carrión se convirtió en el cuarto entrenador promocionado por el presidente, Carlos González, desde su filial, siguiendo los pasos de Rafael Berges (2012-13), el citado Pablo Villa (2013-14) y José Antonio Romero (2014-15), tres técnicos que no llegaron a completar ninguna temporada.
A diferencia de ellos, Carrión es uno de las pocas personas que hayan pasado por la entidad en sus 62 historia que atesoren un ascenso de categoría como futbolistas y entrenador.
El barcelonés logró el primero como jugador en 2007, cuando el Córdoba ascendió de Segunda División B a la categoría de plata en Huesca, mientras que como técnico hizo campeón al filial la pasada campaña del grupo X de Tercera División, para posteriormente dar el salto a Segunda B.
Como futbolista Carrión se formó en el FC Barcelona, donde coincidió con Xavi, Iniesta, Puyol o Pepe Reina, con los que jugó con el filial, para dejar la entidad a los 22 años y pasar por el Gavá y Gimnástic de Tarragona hasta llegar al Córdoba en Segunda División B.
Tras lograr ascender con los blanquiverdes no renovó y pasó por el Terrassa, Melilla y Alavés, su último equipo como futbolista profesional.
Ahora Carrión confía en labrarse una carrera en los banquillos de Segunda, después de pasar en el Córdoba de un día para otro de entrenador circunstancial a definitivo con un contrato que le vincula hasta 2019.