Y es que el reglamento interno del equipo se lo ha saltado a lo grande y por varios puntos. El club londinense no permite a sus jugadores ni trasnochar ni consumir alcohol, y Carroll fue sorprendido haciendo ambas.
La multa que le podría caer al ex internacional inglés podría ascender hasta los casi 200.000 euros, tras ser 'cazado' en estado de ebriedad un martes por la mañana.
Tanto él como el guardameta Darren Randolph fueron sorprendidos ya de buena mañana aún con una borrachera evidente, tras una noche de juerga a la que precedió la cuarta derrota consecutiva de los 'hammers' esta temporada.