"No quiero dejar el fútbol, sencillamente no quiero continuar en el Hellas Verona. Físicamente estoy genial como demostré en los 15 días de preparación", señaló el delantero.
"Pero mentalmente no estoy motivado para continuar en este club. Doy las gracias, de corazón, al presidente Setti, el director deportivo Fusco, al técnico Pecchia y al equipo para su disponibilidad", comentó.
Cassano se encuentra lejos de su familia y esta distancia es la que trae de cabeza a un jugador tan lúcido con el balón en los pies como díscolo fuera del césped.
Cassano atrae los focos estos días por sus continuas dias y venidas. "Este chico no puede con la cabeza. Físicamente está genial y profesionalmente no se le puede reprochar nada. No consigue estar tranquilo en el grupo, quiere estar en su casa. Una pena, porque estaba trabajando muy bien", declaró.