La epidemia del coronavirus sigue abriéndose paso por Europa. La crisis del COVID-19 continúa provocando la paralización de las competiciones deportivas en muchos países.
El Copenhague se enfrentó este jueves al Istanbul Basaksehir en la ida de los octavos de final de la Europa League, el último partido del conjunto danés durante un tiempo.
Siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y el resto de organismos nacionales, Dinamarca decidió aplazar todas sus competiciones por la crisis del COVID-19.
Pero no es el único país que se quedará durante un par de semanas sin fútbol, ya que la República Checa, Rumanía, Suiza y Lituania también decidieron suspender sus competiciones.