En el 7-1 con el que la Fiorentina destrozó a la Roma, en Coppa Italia, Federico Chiesa se puso el disfraz de líder absoluto. Anotó tres goles, dio un recital y conmovió a su afición y a buena parte del fútbol italiano.
Porque con el tercer gol ya en el zurrón, Chiesa corrió hacia una banda. Sus compañeros se agolparon a su alrededor, pero el joven delantero tenía claro su objetivo: honrar la memoria de Davide Astori.
"E' tuo Davide" (es tuyo Davide), gritó en un par de ocasiones. La emoción del atacante se comprobó en su cara. Sus ojos vidriosos corroboraron que el malogrado central fue un gran apoyo para él.
Incluso la propia Fiorentina compartió la celebración a través de sus canales oficiales. Nadie en el fútbol italiano puede olvidar a Astori, fallecido de forma inesperada hace varios meses.
30 de enero de 2019