Esta inversión, que resultó ganadora del proceso de inversiones participativas 2018, se acometerá aprovechando el verano, cuando el campo de fútbol tiene menos uso, según adelanta el Consistorio en un comunicado.
El concejal de Deportes, Jorge Domínguez Jiménez, explica que finalmente las obras serán algo mayores de lo previsto en el proyecto ciudadano, porque, además de la sustitución del césped aprobada, es necesario intervenir en toda la base en la que se asientan los campos.
Además, se van a construir unas gradas entre el campo de fútbol 11 y el de fútbol 7, al mismo tiempo que se van a cambiar las vallas perimetrales de los terrenos de juego.
El edil explica que en los últimos años la base sobre la que se juega al fútbol se ha "ondulado", con lo que se han formado "baches" que "perjudican el correcto uso del campo" y que obligan a realizar una excavación y refuerzo del firme.
Por otro lado, se reforzarán algunas medidas de seguridad y protección existentes para los deportistas, como la sustitución de la barandilla perimetral que bordea los campos de juego por otra más resistente que amortigüe los posibles golpes de los jugadores. Además, en el campo infantil se integrarán defensas en los muros como protección para los niños.