El Espanyol no pudo continuar en Vigo con su excelente racha de pretemporada, pero sumó un interesante punto en un choque con alternativas y que se jugó prácticamente como una partida de ajedrez.
Los de Rubi estuvieron más frescos de inicio, con mucha mayor claridad de ideas, para ir cediendo después del paso por los vestuarios. Al final, concedieron al Celta no sólo la oportunidad de empatar, sino también de haber podido culminar una remontada que, por su falta de hambre, los gallegos no consiguieron.
El Celta, con unos activos Pione Sisto y Hugo Mallo, comenzó con las acciones de peligro. Los celestes tuvieron un par de oportunidades en las botas de ambos jugadores exteriores y de Brais Méndez, que se equivocó y tiró cuando podía haber elegido otra opción.
Quien estuvo cerca de abrir el marcador, sin embargo, fue el Espanyol. Pasado el ecuador de la primera parte, fue Leo Baptistao el que, tras pase de Darder, estuvo a punto de sorprender a Sergio. La oportunidad reactivó al Espanyol, que dispuso de otra ocasión poco después, en las botas de Piatti.
Con la primera mitad ya agonizando, una acción a balón parado cambió definitivamente el destino del choque. Mario Hermoso remachó un saque de esquina y dio ventaja a los suyos de cara a la reanudación.
El Espanyol tenía el encuentro donde quería, pero el Celta se encontró rápido con el empate y el choque volvió a abrirse. Un centro desde la izquierda lo tocó David López y el balón, tras tocar en el palo y sorprender a Diego López, lo remachó tras pasar la línea Iago Aspas.
El tanto volvió a dar paso a los mejores minutos de los locales, que merodearon el 2-1 en acciones de Maxi Gómez, con gol anulado incluido, o Emre Mor, que tuvo la más clara de la segunda mitad en un mano a mano que remató inocentemente a las manos de Diego López.
También los de Rubi pudieron haberse llevado los tres puntos después de un tiro de Sergio García que sacó con apuros a cinco minutos del final Sergio Álvarez.
Al final, justo empate en un entretenido partido que supuso el estreno de la temporada de manera oficial en Balaídos.