Las aguas están revueltas en Portugal. El Benfica es cuarto con 39 puntos. Por delante tiene al Sporting de Braga, al Oporto y al Sporting CP. Estos últimos, los líderes, le sacan 15 puntos.
"Estos dos meses hemos recibido críticas injustas. Como entrenador seré siempre el responsable por los buenos y malos resultados cuando tenga alguna responsabilidad. ¿Si tengo que ver con esta crisis? No, no tengo nada que ver, porque no entrenaba a los jugadores", dijo Jorge Jesus en rueda de prensa.
Jesus insistió en que sus jugadores han estado "dos meses enfermos" -él mismo estuvo varias semanas fuera por una infección respiratoria por COVID-19 y recordó que en enero tuvieron 12 futbolistas con el virus.
"Esta crisis no tiene nada que ver conmigo, no tiene nada que ver con los jugadores. Dicen que no corrían, que no sudaban la camiseta. ¿Cómo la iban a sudar? Estaban enfermos", señaló.
El técnico portugués defendió que "el presidente, el entrenador, los jugadores y la estructura no consiguen controlar una pandemia" y consideró que sus futbolistas ahora "necesitan cariño y no dudas".
"El Benfica debería estar unido", dijo, en referencia a las críticas de la afición, y aseguró que no va a dimitir porque no se siente "responsable" por lo ocurrido.
El pasado miércoles por la noche, varias decenas de aficionados del Benfica se concentraron en coches en las inmediaciones del Estadio da Luz para protestar con bocinazos por la situación del equipo y contra la dirección del club.
Este jueves, el Benfica juega la vuelta de los dieciseisavos de final de la Europa League contra el Arsenal, después de un 1-1 en la ida.