No ha comenzado bien la temporada para el campeón de Argentina. Poco después de ser eliminado de la Copa Argentina, Racing recibió un severo correctivo por parte de River Plate.
El 1-6 encajado en el Cilindro dejó tocado a Coudet y los suyos, lo que hizo que los rumores sobre una posible división en el vestuario estallasen en estas semanas.
La Superliga ha vuelto este fin de semana y Racing se mide a Central Córdoba, pero Coudet aseguró que no hay ningún problema: "Estos jugadores se tiran de cabeza por mí. Tengo una relación excelente con el plantel".
"Hay que salir de esto que nos pegó muy fuerte a todos y caló muy hondo. Tenemos que despertarnos", comentó ante los medios de comunicación y añadió que espera dar un giro de 180 grados.