El técnico de Setúbal se ha embolsado nada menos que 25 millones de euros, lo que supera el récord del mayor finiquito pagado a un entrenador, hasta este día en manos del propio Mourinho.
Porque el del United es el tercer cese mediada la temporada que protagoniza Mourinho. Del Chelsea se fue dos veces por la puerta de atrás con anterioridad, cobrando 22 y 17 millones de euros, respectivamente.
En total, José Mourinho ha cobrado en forma de finiquitos unos 64 millones de euros. Y como no le va a faltar trabajo, no creemos que al luso le de especial pena haber sido despedido.
Otros despidos antológicos los hemos visto sobre todo en la Premier League. El Chelsea, no contento con haber pagado casi 39 millones de euros sólo en despidos de Mourinho, pagó otros 17 a Luiz Felipe Scolari en 2009, y 16.3 a Villas-Boas, ese sucedáneo de Mourinho, en 2012.
También parece que el Chelsea acordó con Antonio Conte una indemnización en torno a los 10 millones. Por suerte para los 'blues', el técnico italiano no se salió con la suya: quería 23.
En Inglaterra también hemos tenido ceses antológicos, como el de Pellegrini al frente del City. La puñalada por la espalda que le dieron al 'Ingeniero' con Guardiola se digirió mejor con los seis millones de euros que el club 'skyblue' le pagó en compensación.
El United también sabe bien lo que es dejarse el dinero, más allá del desfase que le ha supuesto Mourinho. David Moyes le costó al club 10 millones de euros, y algún disgusto. Fue el primero de la 'era post-Ferguson', y dejó bien claro lo que estaba por venir.
El Everton también dio la nota al pagar a Bob Martínez en 2016 nada menos que once millones de euros, la mitad de lo que pagó, ya fuera de la Premier, el PSG a Blanc en 2016. Barbaridades se pagan en todos lados.
En España tenemos al Madrid por encima de todos. Los tres millones de Lopetegui son anecdóticos comparados con las cantidades que estamos viendo aquí, pero también quedan en nada al ponerlos al lado de los siete millones que le pagó a Benítez.