"Cuando hay un derbi no hay cansancio que valga ni viaje, todo el mundo quería disputar el partido", señaló a beIN tras el choque de Riazor, que él desequilibró en la segunda parte.
"Estoy muy contento y más después de tres resultados negativos en Liga. Merecíamos algo más en esos partidos y en este estuvimos bien plantados", dijo.
Sobre la celebración del gol, que molestó al portero Germán Lux porque entendió que el delantero del Celta provocaba a la grada de Riazor, explicó que hizo lo que siempre hace.
"Me quedé quieto, señalando el escudo como cada vez que hago un gol y ya van 21", señaló el jugador gallego.