Se abrió el marcador con un penalti de Fábio a los 20 minutos, que convirtió Grafite. Todo hacía presagiar una goleada: el líder se adelantó temprano, jugaba ante su público, y el Cruzeiro no atraviesa su mejor momento.
Pero no fue así. Con el 1-0 nos marchamos al descanso, y en la reanudación Giorgian de Arrascaeta dio la sorpresa al empatar el encuentro en el '52.
El flamante líder se puso entonces el mono de trabajo y desarmó al Cruzeiro con dos argumentos: buen juego y goles.
Grafite, por segunda vez, marcaba para el Santa Cruz pasada la hora de partido. Arthur ponía el tercero en el electrónico en el '77 y Keno cerraba la goleada en el tiempo de descuento.
Un 4-1 que pone al Santa Cruz de Recife açun más líder, y que hunde al Cruzeiro un poco más en la tabla, dejándole penúltimo.