El vértigo se apoderó del feudo del Liverpool después del latigazo de Wanyama, que dio el pistoletazo de salida para un final de infarto en el minuto 80 con el empate a uno.
A un grosero error en la entrega le sucedió el derribo del guardameta 'red' a Harry Kane, que intentó un triste lanzamiento que no subió al marcador para ira de Pochettino.
El fallo del delantero 'spur' espoleó a los locales que, a lomos de un extraordinario Mohamed Salah, volvió a adelantare en el electrónico en el minuto 92.
El egipcio se deshizo de un nido de defensas con insultante facilidad en una baldosa, para batir de nuevo a Lloris, desatando la euforia en las gradas de Anfield.
4 de febrero de 2018
Sin embargo, Van Dijk, el defensa más caro de la historia, le dio una patada a Lamela, provocando de nuevo una pena máxima que, esta vez sí, materializó Harry Kane en el 95 para silenciar a la hinchada del Liverpool.
4 de febrero de 2018