Pese a los intentos del club y sus compañeros por retener al 'crack' brasileño, a día de hoy las posturas entre ambas partes están muy enfrentadas. Se sigue cocinando el traspaso del verano.
El Barça, a través de algunos de sus cargos intermedios, ha intentado convencer al padre del jugador y al propio Neymar. Pero el contacto entre la presidencia y Neymar no ha sido del todo fluido, señala 'AS'.
Y públicamente, el discurso del Barcelona ha cambiado de forma notoria. Primero fue un "Neymar se queda al 200%". Cuando estalló la 'bomba' del PSG, el presidente Josep Maria Bartomeu lanzó un mensaje de firmeza, pero no tan rotundo respecto al futuro 'culé' de Neymar: "No está en venta".
La última aparición pública de Bartomeu confirma la fragilidad de la relación y una próxima ruptura. "Si quiere irse, que pague su cláusula", señaló este sábado. Toda una declaración de intenciones.
El Barça ha deslizado que, si el PSG ficha finalmente a Neymar y rompe todas las reglas del 'fair play' financiero, denunciará el caso ante la UEFA. Algunas voces interpretan esta maniobra (que no ha sido anunciada públicamente) como una forma de maquillar la salida del delantero y la posición de debilidad en la que quedará la entidad catalana.
El tiempo pasa y Neymar vive las que parecen sus últimas horas como azulgrana. La plantilla ya conoce sus intenciones. El comienzo de la semana que viene será clave para su futuro.