El equipo dirigido por Óscar García Junyent cambió su habitual campo de entrenamiento por el del filial para realizar un entrenamiento, a puerta abierta, en el que el balón fue el gran protagonista.
Tras un ejercicios de calentamiento, los futbolistas trabajaron por grupos la finalización de cara a portería bajo la atenta mirada de los numerosos niños que, aprovechando la festividad por el Carnaval, se acercaron a las instalaciones deportivas de A Madroa para ver a sus ídolos.
El lateral Kevin Vázquez, con un esguince de grado II en el ligamento lateral externo de su rodilla derecha, tampoco saltó al césped y realizó trabajo de recuperación en el gimnasio junto al recuperador Pedro Docampo.
A la conclusión del entrenamiento, los futbolistas se pararon con los más pequeños para fotografiarse y firmar autógrafos. El internacional español Iago Aspas, como suele ser habitual, fue el jugador más solicitado por los pequeños.