No fue fácil para el Olympique de Lyon. Los de Bruno Génésio sufrieron de lo lindo en el Stade du Roudourou, donde tuvieron que remontar al colista de la Ligue 1, al Guingamp.
Marcus Thuram adelantó al conjunto entrenado ahora por Gourvennec en el 21'. El técnico no pudo estrenarse de la mejor forma posible, pero las sensaciones del equipo fueron satisfactorias.
Los visitantes mordieron más fuerte que nunca en el segundo periodo. El doblete de Depay y los goles de Aouar y Cornet le dieron la vuelta al marcador y dejaron el choque visto para sentencia.
Si hubo alguien que destacó por encima del resto fue Memphis Depay. No se conformó con meter dos goles, sino que también dio dos asistencias. Su mera presencia era sinónimo de peligro.
A pocos minutos para el final del partido, Thuram volvió a marcar para el Guingamp. Su gol llegó demasiado tarde. Depay fue más grande que el Stade du Roudouru.