Pese a que el comisario responsable del caso, Clovis Galvao, llegó a informar de que uno de los heridos había muerto, rectificó posteriormente su información y la atribuyó a una confusión.
La secretaría de Salud del estado de Paraná agregó que el hincha del que se temía por su vida había sido dado de alta del hospital en el que fue ingresado y no corría riesgo.
El incidente ocurrió hacia las 8.30 hora local (10.30 GMT) de este domingo en una calle próxima al estadio Couto Pereira de la sureña ciudad de Curitiba.
Según la Guardia Municipal, dos de los autobuses que transportaban aficionados corinthianos para el partido matutino entraron por una calle equivocada y terminaron retenidos en un lugar de concentración de un grupo de hinchas del Coritiba.
Algunos de los aficionados del Corinthians que bajaron de los vehículos fueron atacados por los seguidores rivales, entre ellos uno que cayó al suelo y fue pateado por varias personas.
La Policía Militarizada del estado de Paraná, que llegó rápidamente al lugar de la pelea, consiguió dispersar a los aficionados violentos y evitar un incidente mayor.
Cinco de los heridos fueron trasladados a los hospitales Evangélico de Curitiba, Universitario Cajurú y Hospital del Trabajador, en tanto que otros dos, con heridas sin gravedad, fueron atendidos por socorristas en el lugar del suceso.
En el partido, Corinthians empató sin goles con Coritiba, tercero en la clasificación, y, pese a que se mantuvo invicto en la Liga y como líder, quedó al alcance de Gremio, que este lunes puede desalojarlo de la cabeza de la tabla en caso de que se imponga al Cruzeiro.
Por la tarde, después del partido, la Policía Civil de Paraná presentó a un hombre de 24 años que fue detenido dentro del estadio tras ser identificado como uno de los agresores en las imágenes de las cámaras de seguridad.