"No me habla, está siendo engañado y es muy triste. Es mi gran derrota personal. Él dijo mentiras desde Madrid sin hablar conmigo y yo nunca dije nada. A pesar de todo, Eslovenia le necesita", espetó Kavcic en una entrevista para 'Ekipa'.
Las palabras del ya ex seleccionador no pasaron desapercibidas para la Federación Eslovena, que no dudó en destituir al técnico por poner en duda la profesionalidad de su gran estrella.
El guardameta del Atlético de Madrid pactó con Radenko Mijatovic, presidente de la FE, su ausencia en la última convocatoria, para descansar y superar sus problemas físicos que arrastra en el hombro.
Sin embargo, Tomas Kavcic no supo nada de este acuerdo hasta su despido. Eslovenia necesita la mejor versión de Oblak, no que su seleccionador le discuta su compromiso con la Selección Eslovena.