Dos años del día en el que Bale tocó el cielo y Cristiano bajó al infierno blanco

Este 26 de mayo se cumplen dos años del último gran triunfo europeo del Real Madrid. La final de Kiev fue el punto culminante de la etapa de Zinedine Zidane al frente del conjunto blanco  -aunque el francés ha regresado para reescribir la historia- y también el día más grande de Gareth Bale en el conjunto de Chamartín.

Al margen de aquellos focos que apuntaban al galés y a un desolado Loris Karius, también se cerró la etapa de Cristiano Ronaldo en el equipo de Chamartín. El portugués dio la nota con unas feas declaraciones y ensombreció el tercer entorchado europeo consecutivo de los blancos. Semanas después, se marchaba traspasado a la Juventus en una operación que aún muchos no terminan de creerse.

De vuelta a aquel 26 de mayo, el Real Madrid se enfrentaba a un Liverpool que lo había bordado durante toda la temporada en Europa y llegaba casi como favorito al partido decisivo.

Fue la final de la lesión de Salah por un agarrón de Ramos y de los fallos de Loris Karius, que colaboró involuntariamente en dos de los tres tantos marcados por el conjunto de Chamartín.

También el día en el que Gareth Bale puso de acuerdo a todos los 'merengues' con una chilena fastuosa impecable, ante la que el meta alemán igualmente no pudo hacer nada.

Un título que fue el último hasta la Supercopa de España celebrada en este 2020 en Arabia Saudí. Y ya hay quienes relacionan ese título con la vuelta de Zidane a los mandos de la nave blanca. Con Zidane, nada es imposible para los 'merengues'.