Este Rayo ha tirado por la borda buena parte de la temporada. El cuadro madrileño, cuyo objetivo era volver a Primera, está a las puertas de continuar en Segunda División.
Tenía el encuentro de cara ante Las Palmas y lo echó por tierra en la recta final por culpa de un Advíncula que cometió un penalti de patio de colegio.
El encuentro arrancó con un Rayo ambicioso y en apenas tres minutos ya tuvo un palo. Qasmi se quedó con la miel en los labios a diferencia de Montiel.
En el 20', Isi llegó a línea de fondo y cedió atrás al canterano para firmar el primero. Los de Pepe Mel se vinieron abajo y no respondieron hasta pasada la media hora.
Rubén Castro transformó un penalti por manos de un rival e igualó la contienda. Nerviosismo en Vallecas y todo por decidir para la segunda parte.
Tras la reanudación, el gol del Rayo tardó poquísimo en llegar. Trejo lanzó un libre directo y entre un rebote y Vallés, los de Jémez firmaron el 2-1 que le colocaba bien en la tabla.
Las Palmas estaba a merced de los locales, pero esto es fútbol y todo puede cambiar en un suspiro. Advíncula entró en el 72' y la lió en el 87'.
El peruano pisó a un rival y el árbitro indicó el punto fatídico. Dimitrievski, que unos segundos antes hizo una gran parada a Cristian, le paró la pena máxima a Rubén Castro.
Pero el VAR avisó al árbitro de que el portero se adelantó unos milímetros y la historia cambió. El ex del Betis volvió a lanzarlo y anotó el tanto del empate (2-2).
El Rayo tira por tierra todo lo que había conseguido y se queda a tres puntos de un 'play off' que cierra el Fuenlabrada. Los de Jémez, que le tienen ganado el 'goal average', necesitan un milagro en la última jornada.