Un lustro del Barça como rey del gol

Si el ataque funciona, las probabilidades de que un equipo triunfe se multiplican. Porque, al final, lo que cuentan son los goles.

Y, en lo que al ataque se refiere, cada entrenador tiene sus fórmulas. Pero tener un buen dúo arriba es, sin duda, una de las claves del éxito. Es la lectura que se hace del informe de ProFootball DB.

Los datos no dejan lugar a dudas. En las últimas temporadas, los equipos que han tenido una gran pareja de atacantes, han terminado sumando algún torneo de la regularidad a sus vitrinas.

Y en las últimas temporadas, hay un nombre que se repite una y otra vez entre las parejas más goleadoras: el de Leo Messi.

Solo en este curso, el 2019-20, Messi y su compañero de fatigas no están a la cabeza como dúo con más goles en su haber. Ese privilegio, de momento, está en manos de la dupla Lewandowski-Gnabry. No es de extrañar con el temporadón que se está marcando el Bayern, sin duda uno de los equipos más potentes de lo que va de curso. 

De hecho, no parece descabellado afirmar que el Bayern está llamado a ser el campeón de la Bundesliga. Nadie le tose al equipo bávaro. Quedan solo cinco jornadas para que finalice y el Bayern es líder con 67 puntos. Su perseguidor es el Borussia Dortmund, que le sigue con 60, por lo que tienen un colchón más que importante.

Gran parte de la 'culpa' de ese liderato la tiene la pareja de moda. Entre Lewandowski y Gnabry llevan 40 goles, 29 el primero y los once restantes el segundo.

En anteriores temporadas, la tónica ha sido similar. El equipo con una dupla goleadora a la cabeza ha terminado sumando algún título de Liga o Copa. La Champions es otra historia, en esta competición juegan otros factores. 

De hecho, solo en 2015 coincide que el dúo de 'killers' se llevó una 'Orejona'. Fue en la 2014-15. Ese año, entre Messi y Neymar se repartieron 65 tantos, mérito más que suficiente para ganar la Champions. Muy cerca se quedaron Cristiano y Benzema con 63, 48 de los cuales propiedad del luso, que superó los 43 del mismísimo Messi.

La cruz del Barça es, curiosamente, la Liga de Campeones. Pese a sus grandes números en el torneo de la regularidad, donde parece casi imposible meter mano a los 'culés', ese olfato goleador parece disiparse en Europa. Y más si los azulgrana juegan fuera. Prueba de ello, la caída en Roma en abril de 2018 por 3-0 tras el 4-1 de la ida en el Camp Nou o la remontada que sufrió en Anfield a manos del Liverpool (llegaron con un 3-0 a su favor y se fueron con un 4-0 en contra).

En los últimos tres cursos, los 'culés' han terminado fuera de la Champions y ha sido precisamente por falta de gol. Un dato llamativo si se compara con su hegemonía goleadora en Liga.

Ahí comenzó la supremacía de Messi y su compañero. Da igual quién sea el escudero del '10'. Quien esté a su lado puede dar prácticamente por hecho que estará entre las parejas de máximos goleadores.

En la 2015-16, Suárez ocupó el lugar de Neymar y, de la mano de Messi, se convirtieron en la pareja más goleadora de las grandes Ligas. Y repitieron en la 2016-17, en la 2017-18 y en la 2018-19. Casi nada.

Este curso, para encontrar a la pareja de baile Suárez-Messi hay que descender hasta la sexta plaza de la dupla de 'killers' que más dianas ha firmado. Cabe destacar que el uruguayo tuvo que intervenirse de la rodilla. Lleva sin jugar desde enero de 2020. Una inoportuna lesión que le ha hecho, por primera vez en mucho tiempo, no estar a la cabeza de las parejas más goleadoras. 

Con semejantes cifras no es de extrañar que en el Barça sea prioritario que Messi siga el mayor tiempo posible. Es su mejor baza. De momento, su continuidad parece asegurada al menos hasta 2021.

 

1 de junio de 2020