Dzeko quiere alargar su gran momento en el Metropolitano

Dzeko, nacido en Sarajevo hace 31 años, se convirtió en la última campaña en el máximo goleador de la historia de la Roma con 39 dianas y empezó esta temporada con grandes actuaciones y un registro de 10 goles en 16 partidos disputados.

El capitán de la selección bosnia ya dio muestras de su contundencia en el área en la presente edición de la Liga de Campeones, en la que anotó 3 goles en 4 jornadas para permitir a la Roma acariciar la clasificación a los octavos de final.

Tras poner su firma con un espectacular doblete en el estadio Stamford Bridge londinense contra el Chelsea y encarrilar la victoria de la Roma en el campo del Qarabag de Azerbaiyán, Dzeko quiere debutar con gol también en el Wanda Metropolitano madrileño.

El exdelantero del Wolfsburgo y del Manchester City ya marcó 6 goles contra equipos españoles en su carrera: su rival "favorito" es el Villarreal, al que endosó cuatro tantos, y también vio puerta en una ocasión contra el Real Madrid y el Barcelona.

Todo esto convirtió a Dzeko en un referente de la Roma, aunque su trayectoria en el equipo de la capital de Italia empezó con muchas dificultades y con una relación complicada también con la afición "giallorossa".

El bosnio fichó por la Roma en el verano de 2015 procedente del Manchester City en una operación que rondó los 18 millones de euros y era la apuesta fuerte del club entonces entrenado por el francés Rudi García.

Sin embargo, en esa campaña Dzeko solo consiguió marcar 10 goles en 39 partidos disputados (en todas las competiciones) y fue duramente criticado por la afición por su falta de determinación en algunos encuentros y por fallar varias dianas cantadas.

Esas dificultades ofensivas fueron analizadas y superadas tras la llegada de Luciano Spalletti al banquillo romano, un entrenador que realizó un gran trabajo a nivel de motivaciones para recuperar a una pieza clave de la plantilla.

Y ese esfuerzo dio sus dividendos en la temporada siguiente, la 2016-2017, en la que Dzeko logró volver a expresar todo su gran potencial.

El bosnio marcó 29 goles en la Serie A, 8 en otros tantos partidos de la Liga Europa y 2 en la Copa Italia y contribuyó de forma determinante a la segunda plaza liguera de la Roma y al récord de puntos de la historia "giallorossa" (87).

Su registro goleador no empeoró tampoco tras la marcha, este verano, de Spalletti, y el bosnio ya es un pilar también de la nueva Roma del entrenador Eusebio Di Francesco.

En esta campaña Dzeko se está luciendo, más allá de los goles, por su capacidad de jugar al servicio del equipo, de participar en la creación de las acciones ofensivas y por su constante trabajo de presión en fase de no posesión.

Así, el bosnio forma una delantera completa junto al argentino Diego Perotti y el internacional italiano Stephan El Shaarawy, que junta fuerza física, poder aéreo, rapidez y gran preparación técnica.

Estas características se notaron de forma particular en el último partido europeo de la Roma, cuando los "giallorossi" arrollaron 3-0 al Chelsea con dos goles de El Shaarawy (uno a pase de Dzeko) y un tanto de Perotti.

Con el entusiasmo generado en las últimas grandes prestaciones, Dzeko llegará el miércoles al Wanda Metropolitano, decidido a ampliar su registro goleador y en regalar a su equipo el pase matemático a los octavos de final.