Los seguidores del conjunto holandés bloquearon la salida del automóvil que transportaba a los futbolista. Sin pensárselo, comenzaron a golpear con fuerza en los cristales pidiendo que bajasen a dar la cara.
Los jugadores del Ajax tiraron de valentía y bajaron a dialogar con los hinchas que se encontraban enfurecidos. Allí fueron rodeados por los aficionados, que mostraron en todo momento una actitud violenta.
Ni el cuerpo de seguridad del conjunto holandés fue capaz de tranquilizar a los seguidores que pedían explicaciones por la actuación del equipo ante el PSV, que acabó proclamándose campeón.
16 de abril de 2018