Empieza prometiendo el Mundial de Clubes. Lo que parecía una clara victoria para el debutante neozelandés acabó en pesadilla difícil de digerir. A los 45 minutos el encuentro estaba visto para sentencia. Pero la fe volvió a mover montañas.
A los 15 minutos, el Wellington ya mandaba por 0-2. Un golazo de Barcia y otro de Clapham castigaron el débil inicio del Al -Ain, que se pudo enganchar al choque con un tanto de Caio.
No obstante, el paso por el VAR lo anuló. Tocaba seguir remando. Más aún cuando a un minuto del descanso Ilich aumentó el escarnio. Por si no llevaba suficiente escarnio los asiáticos.
El paso por el vestuario, no obstante, cambió el decorado radicalmente. En menos de cinco minutos de inspiración, el Al-Ain se metió de lleno en el choque. Shiotani y Doumbia comprimieron el marcador.
Sin embargo, la gloria estaba escrita para Marcus Berg. El goleador sueco entró a doce minutos para el final del duelo y en el 85 culminó la gesta de la igualada con un tiro de volea revolviéndose.
Incluso hubo alguna opción más para evitar la prórroga, pero hubo que ir al tiempo suplementario. Siguió dominando el equipo de los Emiratos, aunque nadie pudo evitar la muerte súbita.
Ahí se notaron los nervios, hubo un fallo por cada equipo, incluido el de Berg. Hasta que en el quinto lanzamiento atinó Caio y el meta Essa le leyó el disparo a Gulley.